Paradisiaka

Paradisiaca se escribe con C, pero cuando quise nombrar el blog...no estaba disponible, así que lo escribí con K. Desde que supe que el nombre científico de la planta cuyo fruto es el simple banano, es una poesía -musa paradisiaca- no me lo pueden negar! Quedó grabado en mi mente como el nombre de un sueño que todavía no se ha materializado, y bueno, entretanto se lo presto -el nombre- a este blog.

Mi pasión fatal es la cocina, específicamente la pastelería, y más específicamente, provocar sensaciones gloriosas en aquellos que prueben lo que preparo. ¿Vale la pena pasar horas enteras en una cocina, para producir un postre? La mayoría de la humanidad diría que no, yo digo que si. Por fugaz que sea el resultado de tanto trabajo, no hay nada tan recompensante como ver la felicidad instantánea del que lo prueba; contemplar su deseo de quedarse para siempre en el placer de un bocado que le sacude el alma desde adentro, establecer como si se tratara de un sortilegio, una conexión directa hacia el afecto de las personas, ubicarme en un rincón de su memoria sensorial. ¡Por eso me gusta cocinar!

Paradisiaca es una palabra que, como un mantra me devuelve a un estado en el que nada me perturba, en el que todo sigue siendo posible, donde vale la pena intentar, crear, imaginar. Y para eso es este blog.